Extracción de Litos y Litotricia

Los cálculos en la vesícula biliar (un trastorno denominado colelitiasis) a veces pasan al interior de las vías biliares, o también pueden formarse cálculos directamente en el interior de las vías biliares. Los cálculos en el colédoco se denominan coledocolitiasis. Estos cálculos a veces obstruyen una vía biliar.

Generalmente, los cálculos biliares no producen síntomas, pero si se presentan síntomas u otros problemas, resulta necesario el tratamiento. En Estados Unidos, más de medio millón de personas se someten cada año a una intervención quirúrgica de extirpación de la vesícula biliar.

En el mundo occidental, el componente principal de la mayoría de los cálculos biliares es el colesterol, una grasa (lípido) que normalmente se disuelve en la bilis (pero no en el agua). Cuando el hígado secreta un exceso de colesterol, la bilis llega a sobresaturarse con este exceso y crea partículas sólidas (cristales de colesterol). Estos cristales microscópicos se almacenan en la vesícula biliar, donde se aglomeran y se convierten en cálculos biliares.

Los cálculos biliares pueden quedarse en la vesícula biliar o pasar al interior de las vías biliares. Los cálculos pueden obstruir el conducto cístico, el colédoco o la ampolla de Vater (donde el colédoco se une al conducto pancreático). La mayoría de los cálculos de colesterol en las vías biliares proceden de la vesícula biliar.

Cualquier estrechamiento (estenosis) de las vías biliares puede bloquear el flujo de la bilis o reducir su velocidad, y en tal caso pueden producirse infecciones bacterianas.

A veces se acumulan partículas microscópicas de colesterol, sales de calcio, bilirrubina y otros materiales, pero no forman cálculos. Este material se denomina barro biliar. El barro biliar se desarrolla cuando la bilis permanece en la vesícula biliar demasiado tiempo, como sucede durante el embarazo. El barro biliar suele desaparecer cuando se resuelve la causa, por ejemplo, al finalizar el embarazo. Sin embargo, el barro biliar puede formar cálculos biliares o entrar en las vías biliares y obstruir los conductos.

Síntomas

Alrededor del 80% de las personas con cálculos biliares no tienen ningún síntoma durante muchos años, y a veces nunca, en especial cuando los cálculos permanecen dentro de la vesícula biliar.

Los cálculos biliares pueden causar dolor. Este se desarrolla cuando los cálculos pasan desde la vesícula biliar hacia el interior del conducto cístico, el conducto colédoco o la ampolla de Vater, y obstruyen el conducto. Entonces la vesícula biliar se inflama y causa el dolor característico denominado cólico biliar. El dolor se localiza en la región abdominal superior, la mayoría de las veces en el lado derecho, por debajo de las costillas. A veces es difícil precisar la localización, sobre todo en las personas con diabetes y las de mayor edad. El dolor, de modo característico, aumenta en intensidad a lo largo de 15 minutos a 1 hora y permanece estable hasta un máximo de 12 horas. A menudo, el dolor es lo suficientemente intenso para llevar al paciente al servicio de urgencias en busca de alivio. Una vez que el dolor comienza a remitir, lo que puede llegar a tardar entre 30 y 90 minutos, se convierte en un dolor sordo. Con frecuencia, los pacientes sienten náuseas y vomitan.

En caso de persistir la obstrucción, la vesícula biliar comienza a inflamarse (una enfermedad denominada colecistitis aguda). Cuando la vesícula biliar está inflamada, las bacterias proliferan y puede producirse una infección. Por lo general, la inflamación causa fiebre.

La obstrucción del colédoco o de la ampolla de Vater es más grave que la obstrucción del conducto cístico. La obstrucción del colédoco puede causar un ensanchamiento de las vías (dilatación). También puede producir fiebre, escalofríos e ictericia (coloración amarillenta de la piel y del blanco de los ojos). Esta combinación de síntomas indica que ha aparecido una infección grave denominada colangitis aguda. Las bacterias pueden migrar al torrente sanguíneo y causar infecciones graves en el resto del organismo (septicemia). También se pueden producir focos de pus (abscesos) en el hígado.

 

Tratamiento

 

  • Cirugía para extirpar la vesícula biliar (colecistectomia)
  • A veces, medicamentos para disolver los cálculos biliares 
  • En ocasiones, extracción de los cálculos biliares mediante colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE)

 

Litotricia

En más del 90% de los casos, la coledocolitiasis o presencia de cálculos en los conductos biliares puede solucionarse evitando la cirugía, mediante la técnica de colangiografía endoscópica retrógrada (CPRE) por métodos convencionales. En ocasiones, sin embargo, el gran tamaño de los cálculos en los conductos biliares, su localización en las vías biliares intrahepáticas o su impacto en los conductos biliares no hacen posible la utilización de esta técnica. 

La litotricia es una técnica de fragmentación de cálculos biliares que ha demostrado ser segura y efectiva en más del 90% de los casos. La técnica de litotricia láser para la coledocolitiasis está recomendada en las guías clínicas norteamericanas y europeas para el manejo de esta condición. La principal ventaja que ofrece es que permite un direccionamiento preciso bajo visión directa, con lo que se reduce el riesgo de lesión en el conducto biliar del paciente y la fácil fragmentación de cálculos grandes que luego se pueden remover fácilmente bajo técnicas convencionales de CPRE. 

Tags: endoscopía terapéutica endoscopista en Reynosa gastroenterólogo en Reynosa Litotripsia Extracción de Litos