La polipectomía endoscópica es una técnica que permite la extirpación de pólipos localizados en el tubo digestivo, tanto a nivel alto (esófago, estómago o duodeno) como a nivel bajo (colon).
¿Cuáles son sus indicaciones?
La extirpación de pólipos en el tubo digestivo es necesaria para un adecuado diagnóstico y tratamiento de lesiones premalignas o malignas precoces, evitando en una gran proporción de los casos la posible progresión de estos pólipos hacia lesiones malignas que requerirían tratamientos más agresivos (cirugía, tratamientos oncológicos)
¿Cómo se realiza la polipectomía y mucosectomía endoscópica?
La extirpación se realiza con diferente instrumental según el tamaño y forma del pólipo. Los pólipos de tamaño pequeño se pueden resecar con una pinza que permite morder y eliminar el pólipo. En caso de pólipos de mayor tamaño suele ser necesario el uso de un asa (parecido a un lazo), que permite abrazar al pólipo y cortarlo mediante una corriente eléctrica.
La mucosectomía endoscópica se usa en caso de pólipos más grandes y habitualmente planos (con forma de alfombra), y consiste en la inyección de una sustancia en las capas más profundas del tubo digestivo para separar el pólipo del resto de la pared, de tal forma que la extirpación se puede realizar con un asa de manera más segura.
Lo más habitual es que la exploración se realice bajo sedación, por lo que el paciente no notará nada. En cualquier caso, la polipectomía no es un tratamiento que produzca dolor, aunque puede ser posible que parezcan molestias en relación con el aire insuflado durante su realización. La polipectomía endoscópica es un procedimiento de diagnóstico y tratamiento seguro.
En cualquier caso, el riesgo de complicaciones varía dependiendo del tamaño, localización del pólipo y ciertas características del paciente (como la toma de medicamentos anticoagulantes o antiagregantes), de tal manera que los pólipos de mayor tamaño presentan mayor riesgo de complicaciones. La complicación más frecuente (menos de un 3% de las polipectomías) es el sangrado por la cicatriz de la polipectomía. En muchas ocasiones el sangrado es leve y solo requiere vigilancia.
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